sábado, 24 de marzo de 2007

Gayatri 3 Enero 2005

Por supuesto, temblamos de pavor cuando enfrentamos la posibilidad de asumir nuestras potencialidades. El maestro expresa esa idea cuando dice que en la cumbre el alma se exalta ante el poder del Espíritu Viviente y al mismo tiempo el corazón se acongoja cuando contempla el abismo en el que se sostienen los pies. Ser o tener; el tener y el poder como contracara del amor y la compasión; vivir en la luz o aceptar el eclipse, en definitiva rendir nuestros corazones a la radiante luz de Dios que impregna todo o creado, al estilo del versículo de la Torá: Haz de saberlo y tenerlo en tu corazón y escribirlo en tu mente: fuera de El no hay nada.
No hay modo de escapar a este momento crucial en nuestras vidas, donde se decide nuestro destino como humanos y como seres espirituales. Extensión y profundidad es una misma dimensión que viene a nosotros y nos impele a que asumamos el papel para el cual hemos nacido. Y entonces, cuando esto ocurre, el gayatri mantra anula toda tendencia a la falsa concepción y designación, se conmueve la escala de valores basadas en la fisicalidad y el materialismo y todo es iluminado por el resplandor del Dios Viviente.
Estamos hablando del propósito de la vida humana, esa percepción de Dios capaz de abrir nuestros corazones para ser moradas para Su presencia y de ese modo, capaz de transformarnos y transformar a todos los seres y todas las cosas. Esta experiencia puede negarse o no, el hecho es que viene sucediendo en el mundo en todos los ámbitos donde el hombre sincero, busca la luz.
Este suceso no puede adulterarse, nadie puede interpretar los textos sagrados y las vivencias de acuerdo al capricho de los vaivenes de una mente inestable. Espiritualidad es sinónimo de salud y mente inestable es simplemente inestabilidad psíquica. Por supuesto que el sendero espiritual no puede ser comprendido por la lógica, pero tampoco podemos aceptar que el sendero espiritual se interprete caprichosamente, desde un ámbito de inestabilidad psíquica.
En el sendero de Gayatri Vedanta Yoga son posibles los enfoques diferentes, porque el conocimiento védico es de una riqueza celestial y permite vislumbrar perspectivas positivas, inteligentes y creativas sin perder unidad de concepto y de acción. Las diferencias unen, edifican y construyen lazos de amor y respeto, la única condición necesaria es controlar la mente y las emociones.